El compost

Qué bien que haya tanta gente que les gusta nuestro blog, me alegro un montón que no sólo lo estamos haciendo para nosotros mismos pero que hay gente que les pueda servir lo que redactamos... Muchas gracias por vuestro interés y apoyo!!!

Tal como os comentó Huber en el último post de abonos tenemos que hablar sobre un tipo muy especial: el compost.

Para todos los que podéis hacerlo y tenéis un hueco libre en el jardín os recomiendo instalar una o mejor dos composteras. ¿Por qué? Porque toda nuestra basura orgánica se puede aprovechar como abono en nuestra huerta. Pequeños animales y bacterias lo comen y sus excrementos forman poco a poco una tierra fértil y sana.

Para empezar necesitéis unas composteras (compradas o hechas a mano lo cual es más laborioso). Para empezar os recomiendo un KIT para montaje, que cuestan unos 40,-€ cada una y para ver si os gusta y realmente os ayuda me parece una buena solución, más adelante aún tenéis tiempo para hacer una compostera en condiciones con ladrillo y maderos. (Todos los que les interesa esa parte me podéis escribir y os digo cómo se hace…).

El lugar adecuado necesita algo de sol porque las bacterias trabajan mejor con algo de calor, muy cerca a la huerta (para no tener que recorrer muchos metros cuando ya esté el compost y se lleva la tierra hasta los bancales), y cerca de casa (nosotros lo tenemos a unos 15m de la puerta de casa.
Hay que encontrar el equilibrio entre lo cerca suficiente para no tener que andar hasta allí con cada monda de patata y lo lejos suficiente para que no moleste el olor de la descomposición (que para deciros la verdad: huele muy poco). Además podéis acumular todos los deshechos en casa en un cubo o bote y llevarlo hasta la compostera una vez al día.

Hay muchos libros y cosas escritas sobre el compost pero me parece todo tan exagerado que uno ya no le apetece ni empezar. Si seguís unas pocas reglas os funcionará sin problemas:

1. La compostera debería estar abierta por la parte de abajo y tener contacto directo con la tierra 
2. No os recomiendo tirar comida cocinada o por lo menos taparla con tierra o hierba, ya que si no lo hacéis os atraerá ratones o ratas y un montón de moscas, además el aceite contamina… 
3. El compost se hace en capas, es decir alternar restos de cocina (monda de patata, cáscara de huevo etc…) con tierra (de la huerta misma) y deshechos del jardín (hojas secas, hierba cortada, etc.). 
4. Regar y mantener un poco húmedo (sólo así pueden descomponerse los restos). 
5. No tirar lo que no se deshace fácilmente (huesos, ramas, tallos más duros, etc…) 
6. No se pueden echar frutas cítricas (el ácido daña al equilibrio de bacterias y animalinos) ni frutas con hueso (dicen… probablemente para que no crezca la planta dentro de la compostera). 

 Antes os dije que lo mejor serían dos composteras. La razón es muy simple: el compost necesita muchos meses en convertirse en tierra. Si echamos continuamente material llega el momento que la parte abajo ya es tierra pero la de arriba está aún sin hacer. Por eso nosotros tenemos dos. En primavera se tapa la última capa con tierra y se deja hacerse durante todo el verano y otoño mientras vamos haciendo un segundo compost justo al lado. En invierno cuando hay que preparar los nuevos bancales para el año siguiente se vacía la primera compostera y se abona la tierra. Ya tenemos la primera compostera libre para comenzar un nuevo ciclo.  

Nota: Dicen que vale una sola compostera (de las compradas) porque suelen tener una tapa en la parte inferior para poder sacar la tierra y de ese modo poder vaciar desde abajo mientras seguimos apilando capas desde arriba. Pero esto no funciona porque escavando desde abajo estoy creando un hueco cada vez más grande y antes de llegar hasta el fondo para sacar toda la tierra buena ya se me derrumban las capas superiores. Por lo tanto nunca aprovecho todo el contenido de la compostera.